Chivas es el reflejo del fútbol mexicano
Guadalajara pasó de ser campeón a pelear por la permanencia en primera división en tiempo récord, de ser los mejores a ser los peores en un lapso de dos años. Para llegar a ese deshonroso logro las Chivas necesitaron una serie de acontecimientos catastróficos sin cesar en los últimos cuatro torneos.
Después de coronarse en el Clausura 2017, las Chivas empezaron a perder jugadores claves como Rodolfo Pizarro, Orbelín Pineda, Rodolfo Cota, el ‘Gallito’ Vázquez, JJ Macías y Oswaldo Alanís. Poco a poco se fue desmantelando el equipo hasta caer en la crisis en la cual están actualmente sumergidos.
No hay un solo culpable en esta situación pero el más criticado ha sido José Luis Higuera, directivo sobre el cual han recaído los señalamientos de la afición hasta tal grado de convertirlo en enemigo público número 1.
A las ventas de sus estrellas se les sumaron problemas internos que no han ayudado a mejorar el aspecto deportivo. La convalecencia de Jorge Vergara, la partida de Matías Almeyda y todo su melodrama, las malas decisiones de José Luis Higuera y su destitución, el cambio de presidente con Amaury Vergara, y otros sucesos que han ensombrecido el panorama del ‘Rebaño Sagrado’ en los últimos veinticuatro meses.
En la cancha el equipo ha carecido de talento, la cantera no abastece, los refuerzos son escasos y de poca calidad. La inactividad en los mercados de transferencias son una constante para Guadalajara porque la directiva no quiere pagar los precios altos que imponen los otros clubes. Además de esto, la ideología de las Chivas (sólo jugadores mexicanos) también ha sido otro punto débil en la mesa de negociaciones para contratar jugadores top.
Desde el último título contra Tigres en marzo del 2017, el equipo NO ha invertido. Las últimas contrataciones con gasto han sido las de Alexis Vega 5.28m€, Dieter Villalpando 3.52m€, Jesús Molina 2.63m€ e Hiram Mier por 1.75m€, todos los demás “refuerzos” han llegado con coste CERO. Para no ir más lejos las Chivas se reforzaron para este Apertura 2019 con Oribe Peralta, Antonio Briseño y Oswaldo Alanís, todos libres de coste, mientras que Toño Rodríguez vuelve tras concluir su préstamo.
La directiva no quiere invertir, las fuerzas básicas no producen y a eso hay que sumarle el pésimo rendimiento del primer equipo dirigido por Tomás Boy. En lo que va de su mandato, el ‘Jefe’ sólo ha ganado dos partidos de diez disputados, esas victorias han sido en el último juego del torneo anterior contra León (cuando Chivas ya estaba eliminado y León clasificado) y un amistoso contra los Pioneros de Cancún. Todo lo demás son derrotas.
Ni pies ni cabeza se le ve al ‘Rebaño Sagrado’ que este martes tiene otro amistoso internacional contra el Atlético de Madrid. El prestigio de Chivas ha sido pisoteado a nivel nacional e internacional en las últimas semanas, casi todos sus adversarios los han goleado y seguramente correrá con la misma suerte ante los ‘Colchoneros’.
No se ve la luz del día para las Chivas, están condenados a sufrir en el torneo. Su plantel no da para mucho, su directiva no apoya y su técnico está perdido. Boy tenía varios años sin dirigir un equipo profesional y la última decisión de Higuera fue darle su total apoyo.
El siguiente paso lo tiene que dar el inexperto Amaury Vergara que enfrenta la más grande misión de su joven carrera en el fútbol, no se trata de devolverle la gloria al ‘Rebaño Sagrado’ sino de salvar a un grande como lo es Guadalajara.