No Mou, no problems
Se fue Mourinho y se fueron todos los problemas del Manchester United. Era claro que Mou no era querido en el vestuario, recién salió del club y los jugadores han recuperado la memoria, ya suman cuatro victorias consecutivas con catorce goles a favor y sólo tres en contra.
Ole Gunnar Solskjaer se presentó con la misma magia que tenía como jugador y todavía no conoce la derrota como entrenador de United. Su sistema es un 4-2-3-1, que le da mucha libertad a Paul Pogba, quizás el más beneficiado de la salida de Mourinho. Los números del francés se han disparado y con apenas cuatro juegos ya ha hecho más que en toda la temporada con Mou.
Seguramente Pogba no era el único que estaba molesto con Jose Mourinho, que fue cesado después del patético partido contra el Liverpool en donde Manchester United permitió más de 36 tiros de su rival. El fastidio de los jugadores era claro y sólo se necesitaba echar al portugués para ver una mejoría.
Pero tampoco hay que olvidar que las cuatro victorias del Manchester United con Solkjaer han sido ante rivales de la parte baja de la tabla y nadie debe engañarse con este cambio radical, ni tampoco verlo como una mejorar sustancial del equipo. Será este domingo cuando los Reds Devils tengan su primera gran obstáculo contra el Tottenham en Wembley, segundo lugar de la liga.
Será la única prueba de alto voltaje que tenga United antes de enfrentar al PSG en febrero por los octavos de final de la Champions League, fuera de este juego sus rivales volverán a ser de la parte baja de la tabla, que sin dejar de ser peligrosos, evidentemente no tienen el nivel de los Spurs. Tottenham es el favorito para este partido y si United no cae en la catedral de fútbol, saldrán muy motivados para enfrentar la segunda mitad de la temporada.