A por la 13...
Con muchísimo sufrimiento Real Madrid se metió a la final de la Champions League por cuarta vez en los últimos cinco años, venciendo al Bayern 4-3 en el global. Fue un partido más donde los blancos no juegan bien y si no hubiera sido por Keylor Navas, que estuvo en un plan superlativo, seguramente la suerte de los merengues hubiera sido otra.
Los problemas de Madrid empezaron desde el amanecer del juego cuando Joshua Kimmich abrió la cuenta para los bávaros, pero el gusto les duró poco a los alemanes pues al 10' Karim Benzema se encargó de igualar el partido con un remate de cabeza en el área chica libre de marca. El centro de Marcelo fue precioso y significó gran porcentaje de la anotación. Pero más allá de estos dos últimos toques la jugada estuvo precedida de 28 pases para hacer más hermoso el gol.
De inmediato Bayern Munchen reaccionó y durante el juego tuvo amplias ocasiones de gol, pero Keylor Navas estuvo intratable y evitó que los bávaros se adelantaron otra vez.
El primer tiempo terminó con una jugada muy polémica dentro del área madridista. Marcelo impidió el pasó del balón con su mano y sólo los tres arbitros o no la vieron (lo cual es francamente difícil de creer) o no la consideraron deliberada. Incluso el mismo Marcelo post partido declaró "Si te digo que no fue penal, estoy inventando".
En el segundo tiempo sucedió un error clamoroso apenas unos segundos después del silbatazo de salida. Un balón retrasado del Bayern a su portero significó la voltereta blanca. Sven Ulreich (suplente de Manuel Neuer) se equivocó en el peor momento y le regaló a Benzema el gol. 2-1 Real Madrid.
Fue al 63' después de muchos intentos que el Bayern pudo igualar el juego con James Rodríguez que prefirió recordar su pasado madridista que gritar el gol de los suyos, como muestra de respeto a la afición del Santiago Bernabéu.
Media hora quedaba para la heroica pero los esfuerzos de los alemanes fueron estériles ante la portería custodiada por Keylor Navas que sin duda fue la figura de la eliminatoria y limpia completamente su imagen que quedó manchada un poco tras el error contra la Juventus.
Es así cómo Real Madrid busca su decimotercera Copa de Europa en Kiev el próximo 26 de mayo, su rival saldrá mañana cuando Roma reciba a Liverpool, equipo que llega a la capital italiana con tres goles de ventaja.
Por lo pronto los campeones de Europa prepararan el Clásico de España este fin de semana, en donde deberán hacerle pasillo en Camp Nou al Barcelona, si la cortesía es mayor que la enemistad que hay entre ellos.